Hay un cuento sobre unas habichuelas mágicas que crecían y crecían. En mi tierra llamamos habichuelas a las alubias. No sé "a cuento" de que viene esto, pero me lo ha recordado. ¡Que bonitas fotos!. PS. me encantaría enseñarte unas que he hecho hace poco. No me vendría mal algún consejo. En realidad muchos consejos. Valle
Hola Valle, pues si quieres puedes mandarme el enlace de donde las publiques o enviarme las fotos. Dentro de mi ignorancia te ayudaría en lo que pueda. Un abrazo
Nasss Wen, en la de las alubias había mucha luz aunque no daba frontal y se pudo aprovechar bien. En las de las libélulas estaba en una hondonada, en la cascada de oneta, habia mucha zona de sombrío aunque entraba también sol.
Espero que al final de la trepadora no este el ogro ajajaja. La tercera toma tiene buena profundidad y el final del camino le da fuerza. Saludos.
ResponderEliminarHay un cuento sobre unas habichuelas mágicas que crecían y crecían. En mi tierra llamamos habichuelas a las alubias. No sé "a cuento" de que viene esto, pero me lo ha recordado. ¡Que bonitas fotos!.
ResponderEliminarPS. me encantaría enseñarte unas que he hecho hace poco. No me vendría mal algún consejo. En realidad muchos consejos.
Valle
Rubens, al final no estaba el ogro, había algo pero ¡estaba yo!.
ResponderEliminarCreo que eran fabes, no estoy muy seguro, son de Oneta en el valle del Navia, Asturias.
Saludos
Hola Valle, pues si quieres puedes mandarme el enlace de donde las publiques o enviarme las fotos. Dentro de mi ignorancia te ayudaría en lo que pueda.
ResponderEliminarUn abrazo
Qué bonita la luz y el color de las fotos de estos dos últimos posts. Me gustan mucho ;)
ResponderEliminarNasss Wen, en la de las alubias había mucha luz aunque no daba frontal y se pudo aprovechar bien.
ResponderEliminarEn las de las libélulas estaba en una hondonada, en la cascada de oneta, habia mucha zona de sombrío aunque entraba también sol.